Nuestro pobre copy-glass de gana estaba enojado con los
periodistas por soplar a los cuatro vientos sobre su tesis. Más bien, tenía que
haberles agradecido por anunciar al mundo que estaba super-calificado para
gobernar un país. Porque ahora todos sabemos que está en la misma liga de la
mujer de Donald Trump. Pero lo más gratificante para nuestro campeón debe ser la
noticia de que su propio jefe también está siguiendo sus pasos. Ya les explico.

Ustedes saben que el pobre Maduro Venezolano ya no tiene más
remedio que gobernar su país empapelándolo con decretos, porque los gringos
tienen secuestrado su parlamento. Tantos papeles que ni valen más que un rollo
higiénico. Y en el Ecuador, donde no solo
el parlamento, sino la corte y hasta el bar de las armadas, están repletos de
los borregos más fieles al jefe supremo, ustedes pensarán que aquí los papeles
descansarán donde les corresponde. Pero, ¿para qué preguntar al copión por qué?
Es que nuestro 'maduro', apenas cuando logró saltar del Muisne temblador (de
los gritos, pues) al Relleno afirmado (por tantos perros guardianes que le
rodea), también sacó un montón de decretos de su bolsillo.
Primer decreto: Estado de excepción para Manabí (allá eso
significa que si has escuchado que las escuelas de milenio, los hospitales y
los UPC están caídos por el sismo, o has visto que las maquinarias alquiladas pasaban
los escombros por un lado al otro lado día tras día, estas sordo o ciego) y para
Esmeraldas (aquí la reconstrucción debe significar el engorde de los carroñeros
que rodean la gobernación, porque ninguna casa fue levantada en los 3 meses).
Preguntarán ustedes, 'pero, ¿no necesita un geólogo o sismólogo
para pronosticar el sismo que activa tal tsunami?' Pobres que no saben. Como no
soy periodista, sino un académico iletrado, tengo excepción para soltarles un
secreto más.
Está prohibido olvidar que el jefe durmió en una carpa la
noche de 18 de mayo en el albergue de Mompiche. Había un pequeño detalle, que
hasta la madrugada de ese día no hubo ningún albergue allí. Solamente había dos
casuchas de plástico, cartón y zinc, que dos familias damnificadas lograron
armar al lado de la vía para esperar cualquier regalito. El jefe tampoco podía dormir
en Decameron de Mompiche, pues, es de la oligarquía. Me imaginó que sus asesores
rascaban no sé dónde para cómo cumplir el sueño del jefe. Por milagro,
aparecieron dos remezones fuertes ese día, ¡justo en Mompiche! Yo, que dormía
en Atacames, también era parte de los daños colaterales, me caí de la cama a
las 3 de la mañana. Bueno, ya a la caída de la noche, había más de 50 carpas de
chinos emelecistas, armada en orden militar. Y transportaban las pobres
familias de Mompiche para que los adultos llenen sus barrigas con atún y arroz,
y sus niños canten arrullos al jefe. Si no creían en los poderes secretos del
Estado de excepción, ya saben. Pero, qué molestosos, ¿ustedes quieren saber qué
paso al albergue después? No sean tontos, ¿cómo la gente pueda aguantar arroz y
atún más de una semana? Volvieron a sus casas cuando se hartaron de jugar
albergados. Ojalá que les dieron el pasaje de vuelta.
Así que ya conocen el cuenteo en Muisne y la payasada de
Mompiche. Pero, ¿qué hay de las 8000 almas de Muisne quienes tienen que correr
antes de que los hoteleros les pisen sus talones?
Si quieren dar un salto a la Isla el martes 26 de julio, el
día del manglar, les invita muy cordialmente la comunidad de Muisne. Ustedes primero
pueden disfrutar un sabroso plato de concha asada, pulpa guisada o la cucaracha
tostada. Ya las barrigas contentas con la 'última cena', todos llenemos los
pulmones y gritemos al mundo: "NO NOS VAMOS, ¡AQUI NOS QUEDAMOS!"
-Epilogo-
Espero que mi intento de una sátira política no ha ofendido a
nadie. No hubo intención de calumniar a alguien, pero si por mi novatada he
cometido errores, pido disculpas.
Lo más preocupante de esta historia es que todos los hechos
son reales, salvo unas pocas exageraciones literarias. El atropello a Muisne, y
el silencio total de los medios de comunicación, confirma que el poder político
ecuatoriano promueve terrorismo, con fines de lucro para su clan. Lo hemos
visto en casos recientes de Yasuní, San Pablo de Amali, Tandayme, Intag y en
muchos otros, en distintos tonos. Parece que en todo el continente Americano,
la historia repite con distintos nombres, desde las guerras tribales, pillajes
coloniales, caudillos bárbaros, dictadores crueles y hasta mafiosos 'democráticos'.
Kashyapa A.S. Yapa
Julio de 2016, Esmeraldas.
kyapa@yahoo.com